*Reconocimiento a ex árbitros irapuatenses de basquetbol
*Exitosa trayectoria de Gumercindo Castro Rodríguez y David Martínez Loza
La historia del basquetbol de Irapuato cuenta con personajes que le han dado brillo. Y entre ellos, deben aparecer los nombres de Gumercindo Castro Rodríguez y David Martínez Loza. Ellos brillaron con luz propia en el arbitraje otorgando grandes satisfacciones por su desempeño que los llevó a lo más alto.
Para la organización Freseros Irapuato que compite en Liga Nacional de Baloncesto Profesional, no ha pasado desapercibido al conocer la trayectoria de dichos personajes y para ello les han otorgado un justo y merecido reconocimiento. Evento que tuvo lugar en el Infórum al medio tiempo del encuentro entre Freseros y Astros de Jalisco estando a cargo del señor José Guerrero, gerente administrativo de dicha organización darlo a conocer al respetable ahí reunido.
ENORME PALMARES…
En la década de los 60s, (1962) sin duda una de las más brillantes del basquetbol fresero, el arbitraje contaba con elementos de vasta experiencia y capacidad, tales como David Mares, Fernando Gutiérrez, Ignacio Rivera, Teódulo Avila, Ignacio Barbosa, Bonifacio Trujillo. Eran las cartas fuertes y por ahí aparecieron varios jóvenes con deseos de aprender la difícil pero hermosa carrera.
Entre ellos David Martínez Loza y Gumercindo Castro Rodríguez, quienes pronto mostraron sus alcances y fueron ascendiendo, siempre bajo la supervisión del maestro David Mares quien con sus consejos y hasta regaños los encaminó hacia las alturas, ahí en la legendaria y bien llamada Universidad del Basquetbol Irapuatense (La Fernando Dávila).
Pronto llegaron las primeras satisfacciones para los profesores David Martínez Loza y Gumercindo Castro Rodríguez. Llamados a trabajar en campeonatos estatales, regionales y nacionales. Así se llevaban a cabo los Juegos por parte de la Confederación Deportiva Mexicana (CDM) que dirigía el General José de Jesús Clark Flores.
David Martínez Loza, señaló que su primer campeonato nacional como árbitro fue en Durango. Me sentía un poco nervioso pero tras el primer silbatazo, aquello desapareció para concentrarme plenamente en mi trabajo. Creo, salimos con bien…” relataba, al tiempo que en su voz y rostro se le notaba la emoción al recordar.
AGRADECIDO…
Por su parte, el profesor Gumercindo Castro Rodríguez al hablar de lo vivido en el arbitraje, lo hizo con la misma emoción como se comportaba sobre la duela, así dio a conocer parte de sus experiencias. “La verdad, es algo indescriptible. Los inicios en la Fernando Dávila con los torneos municipales, luego llegó la oportunidad de estar en estatales, regionales y nacionales tanto juveniles como de 1ª. Fuerza “A” y 1ª. Fuerza “B””.
“No puedo dejar de lado mi agradecimiento y reconocimiento para el señor David Mares. Gracias a él es que llegamos hasta donde se nos permitió. Viviré eternamente agradecido para este gran señor…” señaló.
CIMEBA…
El desempeño de Gume y David en el arbitraje no pasó desapercibido para los altos jefes a nivel nacional. Por ese motivo llegó el premio mayor para ambos al ser llamados para integrarse al grupo de árbitros que estarían trabajando en el Primer Campeonato de Circuito Mexicano de Basquetbol (CIMEBA).
“Eran equipos de alto nivel. Lechugueros que tenía como base a buena parte de seleccionados nacionales en ese momento, como Arturo Guerrero, Samuel Campis, Roberto Lua, Toño Ayala, Alfredo Jacobo, entre otros. Santos de San Luis, Chihuahua, Aguascalientes, entre varios más.
La pareja irapuatense Gume y David aparecían en los máximos eventos de este deporte a nivel nacional. Su trayectoria les permitió ser llamados para sancionar finales del Circuito Superior de Basquetbol. Fueron cerca de 4 décadas plasmadas de éxitos en el arbitraje para Gumercindo Castro Rodríguez y David Martínez Loza. Colgaron el silbato como árbitros activos, aunque siguieron aportando sus experiencias para las nuevas generaciones arbitrales.
Sin duda, una carrera brillante la de ambos personajes que son un orgullo y ejemplo para la familia basquetbolera de Irapuato.
Enhorabuena y felicidades, Gume y David…